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1. INTRODUCCIÓN
La innovación y el emprendimiento son dos fuerzas motrices cruciales en el mundo empresarial
actual. La innovación impulsa la creación de nuevos productos, servicios y procesos, mientras que el
emprendimiento proporciona el impulso para llevar estas innovaciones al mercado, en palabras de
Vicens & Grullón (2011 p. 9)
“En América del Sur, la Fundación Chile es un ejemplo de cómo convertir industrias
tradicionales en centros de emprendimiento innovador de clase mundial. Alejandro Valencia,
director de Plataforma de Emprendimiento, señala que los factores críticos de éxito de la
Fundación han sido los siguientes: sostener un diálogo abierto tanto con el sector público como
con el privado, mantener desde el principio un modelo abierto de innovación, contar con áreas
de desarrollo de muy buen nivel técnico y realizar un manejo eficiente del portafolio de proyectos.
El apoyo decidido del Gobierno ha permitido la viabilidad de la institución. Además, Valencia
puntualiza que el criterio de mayor valor al “descubrir” un emprendimiento es la composición
del equipo humano que tiene detrás. Recientemente, Start‐Up Chile, una iniciativa apoyada
por el Estado, planteó el proceso inverso al atraer talento internacional con el propósito de lograr
emprendimientos innovadores, ofreciendo buenas condiciones de vida para el emprendedor y un
mercado de ochenta millones de personas gracias a los tratados de libre comercio que ha firmado
con otros países.”
Entonces, se podría indicar que, el texto resalta cómo Chile ha convertido a las industrias
tradicionales en centros de emprendimiento innovador, promoviendo factores clave para su éxito y
también creando espacios para el fortalecimiento y diseño de Start-Ups con la intención de atraer
talento internacional. En este sentido, esta relación entre la innovación y el emprendimiento ha sido
reconocida como una fuerza transformadora en la economía, estas acciones para Yépez et al. (2019
p. 36) son
“… parte fundamental del capital humano se encuentra la creatividad organizacional, lo cual
permite que el emprendimiento e innovación sea un elemento importante en el desarrollo de
nuevos procesos y productos. Elementos importantes para asegurar, la supervivencia y el éxito
en la empresa o la sociedad. El emprender es un gran reto, pero también, es esencial en la toma
de decisiones para evaluar las distintas opciones que hay en el mercado que mejor se adapten a
uno y a las necesidades existentes. El mundo emprendedor puede ser apasionante en las ideas
innovadoras, pero debe adquirir habilidades para tener éxito y, sobre llevar, los obstáculos de
la mejor manera.”
De esta forma, es relevante señalar sobre importancia de la creatividad en toda organización como
eje potenciador para el emprendimiento y la innovación, de igual forma, conocer la necesidad de
adquirir habilidades y enfrentar retos para tener éxito en los emprendimientos que se puedan
materializar. Ahora bien, en el caso peruano Jiménez et al. (2021 p. 34) señalaron que:
“En el Perú, el emprendimiento empresarial es muy valorado, a nivel de Latinoamérica, es el
primer país, con mejor percepción, respecto a la facilidad para iniciar un negocio y el tercero en
cuanto a las competencias y capacidades, así como oportunidades para el emprendimiento.”