Reina Taipe Buendía
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prácticas que podrían calificarse como contribuciones sostenibles y otras no; sin embargo, otras prácticas
fueron ambientalmente ineficaces debido a la falta de valores biosféricos y la falta de conciencia de las
consecuencias de esas acciones en el medio ambiente. Noufal et al., (2020) recopilaron información
mediante una encuesta realizada en 300 hogares en la ciudad de Homs, así como entrevistas formales
con funcionarios y supervisores de departamentos relacionados; encontraron que las actividades de
compostaje no se aplicaron en las áreas estudiadas y que las prácticas de separación de residuos fueron
impulsadas por los ingresos económicos obtenidos, sin conocimiento previo de los beneficios
ambientales; además, los residentes tenían que practicar formas inadecuadas de eliminar sus desechos
de las áreas residenciales en casos de servicios de recolección de desechos inadecuados y poco
confiables. Zoroufchi et al., (2018) evaluaron el destino de los residuos sólidos urbanos (RSU) y el
comportamiento de los residuos domésticos en la megaciudad de Tabriz; realizaron un cuestionario para
evaluar los conocimientos, actitudes y prácticas de los residentes hacia la reducción de RSU, separación
de fuentes, reciclaje y recolección, afirmando que la evaluación de los comportamientos de los residentes
hacia los RSU demostraron el bajo conocimiento de los encuestados y su alta disposición a segregar los
desechos sólidos.
De acuerdo a la primera hipótesis especifica se puede afirmar que el grado de responsabilidad con las
madres de familia, con respecto al manejo de los residuos sólidos, existe una relación positiva, ya que
tuvimos una rho de 0,024 y un valor de sig. de 0,814 afirmando que el grado de responsabilidad de
madres de familia es mínimo sobre él manejo de residuos sólidos por madres de familia del barrio virgen
del Carmen – Angaraes – Huancavelica. Kanhai et al., (2019) realizó un estudio a 157 hogares en Accra
sobre la eliminación de desechos domésticos y la conciencia de los peligros para la salud, relacionados
con los desechos; aclaramos que los hogares encuestados tenían un conocimiento limitado de los
peligros para la salud relacionados con los desechos en sus vecindarios, aunque los hogares reportaron
enfermedades que podrían estar asociadas con factores ambientales vinculados a la gestión de residuos,
el 87 % de todos los hogares encuestados no pensaba que alguien en su hogar pudiera haber padecido
de una enfermedad que pudiera estar relacionada con los residuos, en vecindarios de ingresos medios y
altos: la quema de desechos aumentan sustancialmente cuando no se recolectan los desechos. En la
investigación de Espinoza Quispe, (2015) se observó que existe un grado de correlación significativa
entre el manejo de residuos sólidos y la gestión municipal. El 87 % de la población encuestada fueron
amas de casa, las cuales tienen un grado de responsabilidad medio con respecto al manejo de los residuos
sólidos dentro de su localidad y hogar.
También Vargas Sacha (2017), observaron que la relación entre la responsabilidad ambiental y la
comunicación ambiental en el manejo de residuos sólidos fue alta cuando los encuestados fueron los
obreros del campamento minero, mientras que la relación fue baja cuando las encuestadas fueron madres
de familia, concluyendo que esta relación es baja y/o negativa, que los obreros y madres de familia
presentan mayor conocimiento en la recolección de materiales sólidos orgánicos, además determinaron
que las madres de familia presentan un nivel bajo de comunicación ambiental en el manejo de residuos
sólidos brindándole un tratamiento inadecuado a sus residuos. De acuerdo a Vives (2014), las
responsabilidad ambiental cubre las actividades orientadas a la reducción del impacto ambiental de sus
operaciones, incluidas cosas como la reducción de desechos y el consumo de recursos naturales, el
reciclaje, la implementación de sistemas de gestión ambiental y similares. En otros términos, se habla
del grado de compromiso que toda persona tiene hacia el entorno que le rodea, esto incluye las
organizaciones, empresas y otros agentes, ya sean públicas o privadas.
De acuerdo a la segunda hipótesis especifica se puede afirmar que el nivel de conocimiento de las madres
de familia con respecto al manejo de los residuos sólidos tiene una relación mínima, ya que la rho de
Spearman fue de -0,133 con una correlación negativa muy baja y un valor de sig. de 0,190; este valor
está por encima del valor de significancia de 0,05; por lo tanto, podemos rechazar la hipótesis alterna y
aceptar la hipótesis nula, asegurando que el nivel de conocimiento es mínimo sobre el manejo de
residuos sólidos por parte de madres de familia del barrio Virgen del Carmen – Angaraes –
Huancavelica. Afirmando que el nivel de conocimiento por parte de las madres de familia es de un 70,71
% de un nivel medio en relación al conocimiento del manejo de los residuos sólidos. Según Prado
Hinostroza, (2018) el nivel de conocimiento es definido como el grado de información adquirido a través
de aspectos tanto sociales e intelectuales, sabiendo actuar frente a determinados contextos.